
Quizá niño y lectura son palabras que no combinan demasiado bien. Ya sabemos que a los niños les encanta moverse, curiosear, trastear y todos aquellos verbos relacionados con el movimiento. Por el contrario, leer es una actividad sin movimiento, excepto para pasar las páginas del libro.
Sin embargo niños y libros no son incompatibles y por eso queremos animaros a regalar libros a los niños. La lectura puede ser una actividad divertida y muy entretenida para toda la familia.
Dependiendo de la edad del niño habremos de enfocarlo de una manera u otra, ya que si son muy pequeños necesitarán que les guiemos y acompañemos y según vayan adquiriendo soltura con la lectura irán siendo más independientes.
La lectura nunca debe tomarse como una obligación, sino como algo divertido que ayuda a pasar un buen rato.
La lectura aporta muchos beneficios, tanto para los adultos como para los niños. No vamos a entrar a enumerarlos, pero sí queremos remarcar que la lectura ayuda a aprender vocabulario, a conocer cómo viven otras personas, cómo es el mundo, cuál es nuestra historia, etc.
También nos ayuda a hablar con los niños y saber qué piensan y qué sienten, ya que los libros reflejan actividades y hechos de la vida cotidiana. Es una buena herramienta para evaluar cómo ve el niño el mundo que le rodea.